Wednesday, July 26, 2006

Una ventaja de los quinceañeros es que no fuman o fuman menos

A mis 30 años finalmente me pude ver y sentir en un festival musical veraniego de clase A.
Ver a Pixies en vivo es un disfrute inigualable, aunque parece ser que se reunen dependiendo de los ceros que les atraigan. Saludaron? No meacuerdo, creo que fuera de Kim nadie hizo nada. Inolvidable el Black al detener 'This Monkey's Gone To Heaven' por el maremoto humano -en elque me encontraba- a punto de romper la valla antipánico.
Pixies, Strokes, Morrissey, dEUS, Tiga, Depeche Mode, Rufus Wainwright, británicos, españoles, francesitos y mucho calor a mi alrededor no me intimidaron aunque por momentos me hacían recordar mi edad. Durante Los Strokes fue claro.
Recordaba algo que leí hace mucho sobre Tommy Hilfiger, el diseñador de ropa; según lo escrito, cuando la ropa de un diseñador empieza a serfavorita de niños y pubertos, es el principio del fin del diseñador. Había un calor que parecían dos y era de noche y Julián Casablancas parecía inmune con su chamarrita de cuero. "Son unos pijos" me dijo un sevillano en el trayecto del Aeropuerto a Benicàssim. Yo estaba muy al frente, ya había aguantado el incidente de Pixies.
Poco antes de iniciar, notaba que a mi alrededor habían muchos quinceañeros, sobretodo quinceañeras. Pensaba que una ventaja de los quinceañeros es que no fuman o fuman menos. Al menos en España. Los más adultos, no sé si de aburrimiento, se metían un cigarro tras otros, a veces en los breves tiempos entre pistas.
Debí haber visto en los Strokes lo que se anunciaba en Tommy Hilfiger, yo creo; si tanto le gusta a los quinceañeros, algo se acerca a su fin.
No importa, los Strokes rescataron el sonido del 2001, antes que Franz Ferdinand y sus discotequeces, donde lo que más me gusta (o lo único que me gusta) es la voz principal. Tampoco importa que tras ellos haya salido una camada de bandas que les ha superado en poco tiempo. Tal vez ya no beben mucho, tal vez ya se casaron, o como yo: ya no tienen 20 años y ya se dieron cuenta. Ya se aburren, tal vez, entre una y otra yse meten cigarros para pasar el tiempo y olvidar que ya no toman.
Creo que regresaré el año que viene.

JP